Antes que cualquier cosa quiero aclarar que me agrada Rueda y lo respeto muchísimo... Me gusta cómo jugaba Honduras, un equipo conciente de sus limitaciones, pero igualmente claro de sus virtudes... Contrario sensu con este Chile que no juega mal, pero lo hace un cuadro atrasado, un cambio menos... como con el freno de mano puesto, pues su accionar es tan lento que es como si anunciaran con bengalas la jugada que viene y esto, me tinca, es por falta trabajo juntos de los muchachos y escases de confianza en algunos de nuestros principales referentes...
Lo otro... en este último partido contra Costa Rica vi un Chile improvisado, falto de jerarquía en puestos clave y muy desordenado... A Isla por ejemplo, no lo escuché más desde el inicio del segundo tiempo, lo mismo me pasó con Vidal... jugadores acostumbrados a ser protagonistas, en este encuentro, poco y nada hicieron...
Me gusta lo que pretende, pero le falta la fluidez que da el trabajo, la sabiduría para elegir y ubicar correctamente a los intérpretes y el tiempo. Me gusta de Rueda, también, eso de que busca en todos lados del fútbol local... Eso que llame a un jugador de la Primera B (a mi juicio, se lo merecía) fue una señal potentemente motivadora y cargada de esperanza para todos los demás jugadores que cada fin de semana, le dan vida al fútbol profesional chileno... Todos, quiero creer, ahora piensan: "en la siguiente nómina puedo ser yo..."
Me agrada la nueva dupla de centrales y si bien no son muy duchos con los pies, eso se notaría menos estando apuntalados por Medel como compañero de zaga y, unos metros delante de ellos, por Díaz, quien, en definitiva, debiera ser el encargado de la salida limpia, la pausa, el pase largo y del manejo de los tiempos del equipo, a cada quien lo suyo o no...
Aunque le duela a Rueda, tengo que decir también, que no puede faltar por ningún motivo Charles Aránguiz, pues la dinámica del equipo, descansa casi todo el rato en él... y cuando falta, el equipo anda un cambio abajo... Vidal se nota dentro de la cancha, brilla, si se quiere, gracias a que el Príncipe está siempre cubriéndole la espalda y llega desde más atrás, causando la sorpresa y creando la diferencia...
Recuerdo que cuando pequeño la sensación cuando jugaba la selección con Uruguay o con Argentina, acá, incluso contra Paraguay, la cosa era, invariablemente, cuesta arriba... casi siempre perdíamos o sacábamos un empate requetecontra trabajado y cuándo ganábamos, lo que era raro, era pidiendo la hora... Luego aparecieron los cabros... y cambiaron el paradigma... Ver jugar a esa selección fue gratificante, hermoso, glorioso y realmente digno de orgullo y admiración... Durante una década la Selección de Chile fue una de las mejores del mundo. Jugaba con soltura, fluidez, coraje y personalidad y, estoy seguro, se farrearon la muy real oportunidad de ser campeones del mundo... Sí, aún me duele... :-(
Don Reinaldo me parece un hombre sensato... no lo conozco, pero al menos, no muere en la suya, pues cambia de un plumazo sus experimentos si no funcionan y reordena sus piezas sobre la marcha, incluso si eso significa hacer algo que dijo no iba a hacer... Al menos a mi, eso me parece un buen síntoma. Sin embargo, en los medios ya están diciendo que está traicionando sus principios, pues reculó en su primera intención en el partido y cuando vió que no funcionaba, tuvo el coraje de desdecirse y hacer todo de nuevo. Para mí, esas opiniones son ciegas y orgullosas, pues me parece más valioso lo que hizo Rueda en vez de haberse sentado en el macho y no ceder ante lo evidente. Don Reinaldo es, a parte de un caballero, una persona valiosa, reflexiva y, al parecer, humilde... Insisto, me agrada.
Pero debo ser sincero... Durante gran parte de casi todos los partidos de la era Rueda, el equipo rara vez toca más de 6 veces seguidas la pelota y, a mi entender, carece de una salida limpia y expedita desde el fondo y de más afiatamiento de los centrales... A propósito de esto, aprovecho e insisto, Gary, sí o sí, debe ser uno de ellos, pues le da al equipo seguridad en la estantería y aporta en esa zona caliente del campo: jerarquía, temperamento, fútbol y, perdonen, pero hay que decirlo, huevos. En la cancha, el pitbull es líder y prenda de garantía, muy especialmente como tercer central. Insisto sueño ver a Chile jugando con línea de tres...
No me gusta hablar de los que no están, pero es notorio que a este Chile le hacen falta algunos nombres (vamos don Reinaldo, llame a Díaz y cuando esté ok, a Charles)... le falta trabajo en conjunto, en equipo, conocerse...y ubicar, como ya fue señalado, a cada uno donde mejor rinde... Don Reinaldo dijo, les faltó chispa y estoy de acuerdo y agregaría concentración... Y para ser justos, cuando cada uno estuvo donde corresponde, funcionaron mejor, pero aún así, sin sorpresa...
En fin... a Chile le falta mucho aún... y le falta la chaucha pa'l peso desde la elección de los intérpretes y su ubicación en el campo, hasta el trabajo necesario para dominar el tema de las pelotas paradas de una buena vez, pues estamos claros, ya no es solo cuestión de altura o no, sino evidentemente obedece a desconcentraciones puntuales donde, dicho de otro modo, pillaron a los muchachos de la Roja con la mirada lejos de la pelota y el meñique hurgando su nariz.
Quiero aclarar que cuando digo que faltan algunos, no quiere decir que esté en contra del recambio, pero recambiemos cuando el que venga de abajo esté mejor que el que está (o debería estar) y, en el caso del cara'e pato, casi todos vamos a coincidir en que es, hoy por hoy, el mejor chileno en su puesto. Empero, Lorenzo, de todas maneras debe estar en el estelar y precisamente delante de Díaz de volante central de corte entre Vidal y Aránguiz. Luego, para el enganche, cuando no esté Valdivia, o el mago Jiménez no de la talla o Valencia siga desaparecido, debe ir Alexis y dejar de delanteros a Puch y Vargas o Paredes o Castillo, intercambiando la posición y tareas, de acuerdo a las circunstancias, entre Alexis y Puch... yaaaa??? estamos listos o no??? jajajajajaja... en fin, en este país, todos somos Maestros Asadores y DT's.
Mención aparte para tres cosas... ingrato partido para Herrera... fue de esos donde casi nunca llegan, pero cuando llegan, llegan hasta el gol... y lo otro... Alguien puede decirme qué injerencia tiene Rueda en el trabajo de las inferiores. Lo pregunto porque cada vez que, escucho, se habla de ellas, todos coinciden en lo importantes que son y muy por el contrario no se entiende el por qué, por ejemplo, los cerebritos de la ANFP no pueden detener el constante y no menor abandono de jugadores verdaderamente talentosos, pero sin un gran bolsillo de papá o mamá como apoyo... En cambio, se da una curiosa coincidencia en las escuelas de fútbol de los clubes profesionales, pues, en muchos casos, avanzan, a todo evento, los chicos cuyos padres suelen apoyar la causa de sus retoños con, por decirlo de una manera elegante, excesiva pasión y, finalmente, el debate sobre fútbol no tiene por qué ser ácido, como lo plantea un periodista del canal Zorro, al fin y al cabo es... sólo fútbol...
En fin, la rueda aún no Rueda, pero tengo esperanza, pues Don Reinaldo, al parecer, es de los hombres que asumen sus errores calladitos y le da, en sentido contrario, si es menester, para lograr hacer funcionar su idea de fútbol en nuestra Selección... Opino, humildemente, que debemos dejarlo continuar, al menos, hasta la Copa América que se nos viene.
Sin embargo, no entiendo el tono con el que la prensa trata al DT... Insisten en ponerlo mal todo el rato, ven su cambio de actitud en el partido de Costa Rica como una señal de debilidad y no ven cuán equivocados están...Son incidiosos. La prensa en este país, no construye, sino que vive de la destrucción de las cosas... profita de la corrupción y sus efectos y redes en las instituciones y, son tan intrigantes y sensacionalistas que más parecen de farándula o crónica roja y, de verdad... me parece curioso que la prensa pida recambio, se le da y no le gusta el método, el modo, los nombres... Exijen a este o a este otro, atribuyendo, al mismo tiempo, a su ausencia, alguna razón oculta o alguna desaveniencia con alguien o qué se yo... Creo que a la prensa nacional le sobra exitismo y datos estadísticos e históricos, pero adolece de humildad y sensatez, esa que le sobraba a Don Julio Martínez, uno que se fue y que no tuvo la alegria de ver a su Chile campeón. Aún se le echa de menos...
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